José Ángel Brena
Cuando publicamos el artículo “Los muros de hormigón aspillerados” en la Revista Digital “Saibigain”, número 4 – otoño de 2017(1), se barajó la posibilidad de que en un futuro dicho artículo pudiera ser revisado o modificado según aparecieran nuevos documentos, fotos o testimonios que reportasen nuevos datos, desconocidos en el momento de la redacción del artículo dedicado a estas llamativas fortificaciones(2).
Con la digitalización e incorporación a la web de la Biblioteca Nacional de 11.000 fotografías de la Colección de la Guerra Civil Española, se han descubierto miles de fotos inéditas de dicha contienda que hasta ahora habían pasado desapercibidas al no estar catalogadas o ser difícil su localización geográfica. Y entre ellas ha aparecido una dentro del volumen denominado “Diversas escenas de la guerra en Vizcaya” en la que se ve un muro de mampostería aspillerado cerrando una carretera, con requetés y soldados(3) posando al lado de él y en la cual en su reverso puede leerse la siguiente anotación: “VIZCAYA– Parapeto de piedra y cemento hecho por los rojos para defenderse ante Sodupe y que abandonaron en su precipitada fuga”. Este texto, dejando a un lado su carga propagandística, nos pone en la pista de donde se encontraba ubicada esta fortificación, lo cual ha sido de gran ayuda puesto que la zona ha cambiado considerablemente en los últimos 81 años. Gracias a Manu Castro la localización ha sido más sencilla, pues inmediatamente situó y verificó, el lugar donde se encontraba esta fortificación, que efectivamente correspondía al término municipal de Sodupe. El muro se encontraba en la parte alta de la carretera BI–3651 que une Sodupe con Bilbao, dentro del poblado y en una parte donde ya habían confluido, a través del puente de la calle Gallarraga sobre el rio Cadagua, las carreteras que unían a Bilbao con Balmaseda, Gordexola, Okondo, Laudio/Llodio, etc., a través de la BI–3651. Hoy día el lugar está completamente modificado por la posterior transformación urbanística, pero hay tres detalles en la foto que permiten comprobar que se trata de la misma zona. El primero y principal son los montes que se ven al fondo de la imagen y cuya forma característica no ha variado, el segundo es la casa que se entrevé tras el inicio del lateral derecho del muro y que mantiene su ubicación(4). Y el tercero, las trincheras que se ven en el lateral derecho construidas monte arriba y que pertenecen al 2º Sector del Cinturón de Hierro. Atrincheramientos que pertenecen también a este muro de mampostería aspillerado. Gracias a todos estos detalles y al uso de las nuevas herramientas de geolocalización, junto con los mapas de época del Cinturón de Hierro, se ha podido ubicar, sin lugar a dudas, el lugar en el que se alzaba esta fortificación.
Casualmente, esta fotografía de la Biblioteca Nacional no ha sido la única que ha aparecido, sino que también, y procedente de un archivo particular, nos ha llegado desde Italia otra imagen del mismo muro, pero esta vez realizada desde la parte interior. En ella se ve a tres soldados italianos del CTV(5) junto a cuatro niños, probablemente vecinos de la zona, posando todos ellos sobre la repisa de hormigón preparada para el emplazamiento de los soldados que han de ocupar las aspilleras superiores. En el reverso puede leerse la fecha del “12 de julio de 1937” y el texto "Tratto del famoso Cinturone di Ferro che doveva salvaguardare Bilbao”.
Tras observar detenidamente ambas imágenes se puede decir que las características y tipología del muro, son idénticas a la de los muros de hormigón aspillerados hasta ahora estudiados, a excepción de que este ha sido construido en mampostería. Detalle que hace que tengamos que plantearnos que este tipo de muros no solo se construían en hormigón, sino también en mampostería; muy bien realizada por cierto, ya que la unión de las piedras ha sido revocada con cemento con mucho esmero, como si se tratara de una construcción civil y no de una fortificación de campaña, construida con las premuras de tiempo, escasez de materiales y mano de obra propias de una contienda bélica. Lo cual nos indica que quienes lo construyeron eran obreros experimentados en trabajar este tipo de materiales. El muro comparte con los de hormigón el tamaño, las dimensiones de la puerta de paso de personas y vehículos, y la colocación de las aspilleras para fuego de fusilería a tresbolillo(6). En la foto de la parte interior del muro podemos ver que sólo posee la repisa de hormigón para los fusileros de las aspilleras superiores en el lado izquierdo (visto desde el interior), mientras que en el lado derecho no existe repisa alguna. Esto puede ser debido a que igual todavía no se había terminado de construir completamente, ya que si no en ese lado derecho los soldados no podrían colocarse debidamente ante las aspilleras superiores para poder abrir fuego. También se aprecia que carece de los nervios que si tienen los muros de hormigón para dar más consistencia a la estructura. Es probable que estas construcciones de mampostería fueran lo suficientemente consistentes por sí mismas para no necesitar de estos refuerzos. Tampoco se observa la acanaladura a ambos lados de la puerta para la colocación de un caballo de frisa que cierre el paso; ni posee alero en la parte superior para proteger a los ocupantes de la metralla de posibles explosiones de granadas o proyectiles de artillería. Está claro que, aunque comparte tipología con sus “hermanos” de hormigón, posee unas características propias que lo hacen único dentro de este tipo de fortificaciones del Frente Vasco.
Así pues, nos encontramos ante un nuevo elemento del patrimonio arquitectónico construido de las fortificaciones vascas de la Guerra Civil no catalogado hasta ahora, de una tipología común a los muros de hormigón aspillerados, pero con unas características propias y perteneciente a las fortificaciones del Cinturón de Hierro de Bilbao. Esto nos vuelve a demostrar lo que ya comentábamos en el artículo anteriormente citado:
(…) es probable que cada encargado de obra de cada sector pudiera tomar algunas decisiones en la construcción de estas fortificaciones, añadiendo a las condiciones básicas otras características pensadas para mejorar la fortificación(7).
Es precisamente en el 2º Sector del Cinturón de Hierro(8) donde se dan una gran cantidad de variaciones en sus obras, comunes a toda la línea fortificada, como por ejemplo en nidos, abrigos, atrincheramientos, etc., e incluso fortificaciones únicas como los “escudos para tirador”, que sólo se encuentran en este sector. El comandante de ingenieros Luis Villar Molina comentaba como una de las claves de la fortificación lo siguiente: “En fortificación no caben reglas fijas; los libros dan consejos. Al ejecutante toca en cada caso, en cada situación y en cada momento pesar las ventajas y los inconvenientes de cada solución y decidir la que se va a emplear”(9). Es decir, que las obras de fortificación siempre han de ser susceptibles de una mejora, atendiendo a los materiales de construcción que se posean, las características del terreno, las armas a emplazar en ellas y el número de tropas que puedan ocuparlas llegado el momento. Y en este sector parece que los señores Urruticoechea, Jefe Técnico del Sector, y José Helguera, Inspector Jefe, fueron fieles seguidores de estas indicaciones a tenor de las variedades encontradas en las fortificaciones.
Por lo tanto, tras esta nueva fortificación localizada, el número total de este tipo de muros aspillerados construidos, hasta el momento, es de ocho. Tres en el denominado Frente de Álava y cinco en el Cinturón de Hierro de Bilbao. Y digo de momento, porque solamente la Biblioteca Nacional, sin entrar ya en otros fondos de otros archivos públicos o particulares(10), atesora más de 44.000 imágenes de la Guerra Civil Española y de momento “solo” una cuarta parte (11.000) están digitalizadas y accesibles para todo el público. Con lo cual es probable que puedan seguir apareciendo imágenes inéditas que nos muestren más fortificaciones que actualmente se encuentran desaparecidas y olvidadas.
Agradecer a Manu Castro su ayuda en la ubicación del muro, a Silvano Cabri por ceder la fotografía desinteresadamente y a Giampaolo Sorba por sus gestiones para conseguirla.
Notas:
(1) https://goo.gl/fkoq4g
(2) “Con el paso del tiempo es probable que aparezca más documentación o fotografías sobre estas construcciones y sea necesario volver a revisar lo escrito sobre ellos (…)” en Saibigain nº 4 (2017), p. 52.
(3) Es probable que sean tropas de la 1ª Brigada de Navarra, que ocuparon el pueblo de Sodupe el 24 de junio con el 2º Bon de San Marcial y los blindados.
(4) Iorgi Ibarra Auzoa Nº5.
(5) Corpo Truppe Volontarie. La fotografía es cortesía de Silvano Cabri y fue realizada por su padre, el Centurione (grado de la Milicia Fascista equivalente a Capitán) Giacomo Cabry del Batallón de Asalto "Folgore" del 3° Regimiento de la División "Volontari del Littorio". En ella junto a los niños aparecen en la parte superior un alférez y a ambos lados de este dos sargentos, todos ellos de la misma unidad que Giacomo Cabry.
(6) El muro posee en el lado izquierdo once aspilleras, cinco en la parte superior y seis en la inferior. En el lado derecho cuenta con el mismo número de aspilleras y en la misma colocación. Contando pues con 22 aspilleras para fuego de fusilería, una concentración de fuego suficiente como para suplir el fuego de una ametralladora.
(7) Saibigain número 4, opus cit, p. 38.
(8) Este 2º Sector del Cinturón de Hierro comienza en el camino de Galdames a Castaños y termina en el monte Ganekogorta.
(9) Villar Molina, Luis. (1942). Manual de fortificación de campaña. Madrid; Ediciones Ejército. Pág. 234.
(10) Archivos muchos de ellos sin sus fondos digitalizados ni disponibles en internet o ni tan siquiera accesibles.
Fotografías:
1. Muro de mampostería aspillerado de Sodupe. Foto Biblioteca Nacional.
2. Reverso fotografía muro de mampostería aspillerado de Sodupe. Foto Biblioteca Nacional.
3. 12 de julio de 1937, soldados del CTV pertenecientes al Batallón de Asalto "Folgore" del 3° Regimiento de la División "Volontari del Littorio" posan en la parte interior del muro junto con niños del pueblo. Fotografía de Silvano Cabri.
4. Detalle de uno de los mapas del Cinturón de Hierro, proporcionado por el capitán Alejandro Goicoechea al bando sublevado, donde se muestra la línea del Cinturón de Hierro a su paso por Sodupe. Marcado con flecha azul la ubicación del muro y con flecha roja el puente de la calle Gallarraga. Mapa AGMAV.
5. Ortofoto señalando con flecha azul la ubicación del muro y con flecha roja el puente de la calle Gallarraga. Foto Google Earth.
6. Lugar de ubicación del muro actualmente. Foto Google Earth.