La dureza de los combates del 11 de junio obliga al general Gamir a modificar la defensa del Cinturón, reforzando toda la línea Gaztelumendi-Urrusti-Berreaga con nuevos batallones, incluyendo a la VI Brigada vasca y a la II de Asturias. Con 20 piezas de artillería y sin aviación debe hacer frente a una masa de más de 160 cañones y obuses y a más de 100 cazas y bombarderos, que baten la zona elegida para la ruptura desde primera hora del 12 de junio, llegando a caer 80 proyectiles/minuto. La resistencia es imposible y a las 14:30 horas 12.000 hombres de la I, V y VI Brigadas de Navarra se despliegan en abanico tras atravesar un pasillo de tres kms de anchura.
Mapa original del Ejército Vasco del Archivo General Militar de Ávila